Los legisladores franceses votaron a última hora de ayer sábado 10 de abril, la prohibición de los vuelos nacionales franceses, en rutas que pueden cubrirse en tren en menos de dos horas y media, ya que el gobierno busca reducir las emisiones de carbono
La medida es parte de un proyecto de ley del medio ambiente más amplio que tiene como objetivo reducir las emisiones de carbono francesas en un 40% en 2030 desde los niveles de 1990, aunque los activistas acusan al presidente Emmanuel Macron de diluir las promesas anteriores en el proyecto de ley.
Esta votación se produjo días después de que el estado francés informara que contribuiría a una recapitalización de Air France con una ayuda económica que alcanza los 4 mil millones de euros ($ 4,76 mil millones), para mejorar sus finanzas después de más de un año de restricciones de viaje por COVID-19.
La ministra de Industria, Agnes Pannier-Runacher, desestimó las críticas provenientes de la industria de la aviación de que este no era el momento de prohibir algunos vuelos nacionales, cuando se intenta recuperar la industria del transporte de pasajeros, además añadió que no había contradicción entre el rescate a Air France y el proyecto de ley climática.
Algunos activistas ambientales han dicho que el proyecto de ley no va lo suficientemente. Un foro climático de ciudadanos establecido por Macron para ayudar a dar forma a la política climática había pedido la prohibición de vuelos en rutas donde el viaje en tren dura menos de 4 horas.