Por primera vez el Ejército de Chile incluyó en su entrenamiento aerotransportado a perros de operaciones especiales o “perros de guerra”. Lo anterior se concretó durante un Período de Mantenimiento de la Eficiencia en Salto Libre en Paracaídas, actividad efectuada entre el 16 y el 22 de marzo, en sectores cercanos a la ciudad de Rancagua.
En la oportunidad participaron efectivos de la Agrupación de Fuerzas Especiales de la Brigada de Operaciones Especiales (BOE) “Lautaro”, en conjunto con personal de la Brigada de Aviación Ejército (BAVE), junto a tres canes adiestrados en el Centro de Control, Reproducción y Adiestramiento Canino del Ejército (CCRACE), perteneciente al Regimiento de Policía Militar N° 1 “Santiago”, y que pronto se integrarán a la BOE.
La relevancia de esta iniciativa, señala el Comandante de la Brigada de Operaciones Especiales “Lautaro”, General Rodrigo Marchessi A., “es sumar un nuevo recurso a operaciones de este tipo, lo que se concretó mediante un entrenamiento de ambientación aerotransportada de perros de combate, los cuales fueron debidamente equipados para actuar durante los ejercicios. Con ello, se aumentan las capacidades de las Fuerzas Especiales en la búsqueda de amenazas, o bien para colaborar en situaciones distintas a la guerra. En ese sentido, los canes han mostrado agilidad y excelente rendimiento en operaciones efectuadas por los mejores ejércitos del mundo”.
En el ejercicio en el que se concretó la iniciativa, el personal militar ejecutó saltos a gran altura HALO – HAHO diurnos y nocturnos (todos ellos con y sin equipo). Mediante este operativo se busca que el personal militar mejore sus destrezas en cuanto a la inserción en distintos escenarios o bien aumente sus capacidades para acceder a zonas aisladas durante una emergencia o catástrofe, con el fin de ir en apoyo de la comunidad.
La relevancia de este período, señala finalmente el oficial es que “mediante este método de inserción se permite proyectar a las patrullas con mayor rapidez en cualquier parte del país, al contar con el apoyo de medios de ala fija y ala rotatoria. Para lograrlo, se requiere una extensa planificación y un trabajo en equipo muy serio, ya que las operaciones muchas veces presentan un alto nivel de riesgo. Asimismo, permite mantener un excelente nivel de Interoperatividad entre la BOE “Lautaro” y la Brigada de Aviación (BAVE)”.
Fuente e imágenes: Ejército de Chile.