Un Tribunal de la ciudad de Praga ha declarado en quiebra a Czech Airlines. El destino de una de las aerolíneas más antiguas del mundo lo decidirá un tribunal, los administradores de quiebra y sus acreedores.
Los acreedores de la empresa deben presentar sus reclamaciones lo antes posible ya que el tribunal convocó una reunión de acreedores en junio el 2021.
Según la petición de insolvencia, Czech Airlines tiene alrededor de 266 acreedores, principalmente entre proveedores, y alrededor de 230.000 pasajeros acreedores, principalmente debido a vuelos no realizados en el pasado.
Czech Airlines debe alrededor de 800 millones de CSK (30 millones de euros) a los proveedores y 1.000 millones de CSK (38 millones de euros) a los pasajeros. Cabe destacar que la aerolinea durante la pandemia no ha recibido ayudas financieras de parte del gobierno.
Al momento la línea aérea continúa realizando sus vuelos a la espera de una decisión sobre si la aerolínea debe continuar operando o vender sus activos.
Czech Airlines fue fundada el 6 de octubre de 1923, siendo la quinta aerolínea más antigua. Hasta antes de la pandemia conectaba Praga y con los destinos más importantes de Europa y puntos de tránsito en Norteamérica, Asia, el Oriente Medio y África del Norte, transportando más de 2 millones de pasajeros por año.
Su flota de aeronaves en el último tiempo estuvo compuesta por ATR 42/72, Airbus A319, Airbus A320, Airbus A321 y Boeing 737. También operó aeronaves de cabina ancha, como el Airbus A310 y Airbus A330, alcanzando a tener un total de 84.
La quiebra de Czech Airlines, sería una gran perdida para la industria e historia aeronáutica, una nueva victima de la pandemia del Covid-19, que dejará a más de 450 personas desempleadas solo en República Checa.
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