La Administración Federal Aeronáutica de los Estados Unidos, ha expresado su preocupación por la ocurrencia de varios eventos recientes de aerolíneas norteamericanas que casi terminaron en una catástrofe.  Específicamente los ocurridos en en Nueva York, Austin y Hawái.

Billy Nolen, el administrador interino de la Administración Federal de Aviación está creando un comité de revisión de seguridad.  El grupo evaluará los incidentes recientes y determinará si hay tendencias emergentes.

Nolen, describió su plan para evaluar la seguridad de las aerolíneas mediante el establecimiento de un comité de revisión de seguridad que «examinará la estructura, la cultura, los procesos, los sistemas y la integración de los esfuerzos de seguridad del sistema aeroespacial de los Estados Unidos», en un memorando enviado Martes (14/2/2023) recién pasado y que apareció publicado en varias Redes Sociales.

En este documento Nolen señala “Estamos experimentando el período más seguro en la historia de la aviación, pero no podemos dar esto por sentado”, además señalo “Los eventos recientes nos recuerdan que no debemos volvernos complacientes. Ahora es el momento de mirar los datos y hacer preguntas difíciles«.

A sí mismo, Sara Nelson, presidenta de la Asociación de Asistentes de Vuelo “CWA”, elogió a Nolen por su decisión, señalando «AFA será un participante activo en el Llamado a la acción y la cumbre de seguridad, al igual que ponemos la seguridad primero todos los días en el trabajo«

La FAA también le ha encomendado al Equipo de seguridad de la aviación comercial de la agencia que analice los datos y busque eventos similares a los observados en las últimas semanas, así como determinar si hay tendencias emergentes.

Esta decisión de actuar llega después de varios incidentes graves que involucran a cinco aerolíneas diferentes.

El primero fue el 13 de enero en el que un Boeing 737 de Delta Air Lines estuvo a punto de chocar con un Boeing 777 de American Airlines en el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy de Nueva York. El avión de Delta estaba autorizado y listo para despegar cuando el avión estadounidense cruzó la misma pista activa, lo que obligó al 737 a detenerse abruptamente y acercarse a 426 Mtr (1.400 ft) del 777.

Tres semanas después, un Boeing 767 de FedEx casi aterriza encima de un Boeing 737 de Southwest Airlines en Austin, Texas. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte dijo que los dos aviones estaban «probablemente a menos de 30 Mtr (100 pies) verticalmente uno del otro«.

Desde entonces, la NTSB y la FAA iniciaron investigaciones sobre ambos eventos, la primera también investigó un evento de diciembre en el que un Boeing 777 de United Airlines descendió rápidamente después del despegue de Kahului, Hawái, y se acercó a 200 mtrs. (775 pies) del océano. «Debemos asegurarnos de que nuestra estructura sea adecuada para el sistema aeroespacial de los Estados Unidos tanto de hoy como del futuro«, escribió Nolen en el memorando. «Sabemos que nuestro sistema de aviación está cambiando drásticamente. Ahora es el momento de actuar».

El comité comenzará con la celebración de una cumbre de seguridad en marzo 2023, que incluirá a líderes de la industria y organizaciones laborales, para determinar qué medidas de mitigación de riesgos están funcionando y cuáles podrían ser más efectivas.