Aunque la FAA sostiene que no afectará los plazos de certificación, la agencia anunció el 9 de mayo que estaba revisando sus protocolos de certificación para aeronaves eléctricas de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL).
En lugar de los requisitos basados en el rendimiento según lo dispuesto en las reglas de certificación de la Parte 23 (aeronaves pequeñas) como se planeó anteriormente, ahora los eVTOL se evaluarán como aeronaves de «elevación motorizada», una categoría establecida originalmente para acomodar rotores basculantes civiles como el Leonardo AW609.
Las implicaciones del nuevo acuerdo son confusas y se dice que son potencialmente preocupantes desde la perspectiva del capital de inversión para los desarrolladores de eVTOL como Joby Aviation, Archer y Beta Technologies. Los tres han dicho que esperan la certificación de la FAA en 2024.
Según se ha informado, el impulso para el cambio provino de una auditoría en curso realizada por la Oficina del Inspector General del Departamento de Transporte (DOT) de los Estados Unidos, el cual se dice que los llamados vehículos Urban Air Mobility presentan a la FAA «nuevos y complejos desafíos de seguridad«.
De la declaración de la FAA, podemos destacar: “Las regulaciones de la FAA [certificación de la Parte 23] fueron diseñadas para aviones y helicópteros tradicionales. Sin embargo, estas regulaciones no anticiparon la necesidad de capacitar a los pilotos para operar aviones de despegue vertical, que despegan en modo helicóptero, hacen la transición al modo avión para volar y luego vuelven al modo helicóptero para aterrizar”.
Lo que hace que la declaración de la FAA sea confusa es la mención de planes «a largo plazo» para desarrollar regulaciones futuras para eVTOL en la categoría de despegue vertical con respecto a «operaciones y capacitación de pilotos«. Mientras tanto, sin embargo, a corto plazo, la FAA citó planes para crear un proceso de «clase especial«, según las reglas FAR 21.17 (b), que supuestamente incorporará los estándares de aeronavegabilidad basados en el rendimiento de la Parte 23.
«Este proceso de “clase especial” está diseñado para abordar las muchas características novedosas de aeronaves únicas, como estos diseños emergentes de despegue motorizado«, según la agencia. “Este marco regulatorio ya existe y este enfoque es consistente con los estándares internacionales”.
“Nuestro proceso para certificar las aeronaves permanece sin cambios. Todo el trabajo de desarrollo realizado por los solicitantes actuales sigue siendo válido y los cambios en nuestro enfoque regulatorio no deberían retrasar sus proyectos. A medida que este segmento de la industria continúa creciendo, esperamos certificar nuevas tecnologías innovadoras que cumplan con los estándares de seguridad que el público espera y merece”.
La principal prioridad de la FAA es asegurarse de que el público que vuela esté seguro. Esta obligación incluye nuestra supervisión de la generación emergente de vehículos eVTOL. La agencia busca un marco predecible que se adapte mejor a la necesidad de capacitar y certificar a los pilotos que operarán estos nuevos aviones.
Imagen: Joby Aviation