Ucrania y Suecia han firmado una carta de intención que marca un punto de inflexión en la cooperación militar europea: Kiev podría recibir hasta 150 aviones de combate Gripen E, el modelo más avanzado fabricado por Saab y una de las plataformas más modernas de la OTAN.
Un paso estratégico para la defensa ucraniana
El acuerdo, suscrito el 22 de octubre de 2025 en las instalaciones de Saab en Linköping, fue anunciado por el presidente ucraniano Volodímir Zelenski y el primer ministro sueco Ulf Kristersson. Ambos líderes destacaron que el documento —una carta de intención o Letter of Intent (LoI)— sienta las bases de una cooperación de largo plazo que podría transformar la Fuerza Aérea Ucraniana en una flota plenamente interoperable con los estándares de la OTAN.
Kristersson señaló que este entendimiento constituye el primer paso hacia un futuro contrato de exportación de gran escala, posiblemente entre 100 y 150 unidades, lo que posicionaría a Ucrania como el principal operador internacional del Gripen E. Zelenski, por su parte, afirmó que el objetivo es incorporar al menos un centenar de aparatos para reforzar la superioridad aérea frente a la aviación rusa y marcar el fin de la dependencia de plataformas de origen soviético.
Un cambio doctrinal hacia la interoperabilidad OTAN
Con esta carta de intención, Suecia —miembro pleno de la OTAN desde marzo de 2024— se convierte en el primer país aliado en ofrecer una flota completa de cazas nuevos a Ucrania. El acuerdo también contempla el entrenamiento de personal, transferencia tecnológica y cooperación en mantenimiento, con el objetivo de fortalecer la autonomía ucraniana en la operación de sistemas aéreos modernos.
La introducción del Gripen E supone un salto cualitativo respecto a los MiG-29 y Su-27 aún en servicio. Su integración permitirá estandarizar doctrinas de empleo aéreo y asegurar la compatibilidad con misilística occidental.
Fuente: Ministerio de Defensa de Suecia (MoD).
Imágenes: MoD, Saab.







