La Armada belga ha incorporado su primer buque de contramedidas de minas, el Oostende (M940), marca clave en la modernización naval dentro del programa conjunto rMCM con los Países Bajos. Este innovador buque de la clase City introduce tecnologías avanzadas que permiten localizar y neutralizar minas marítimas a distancia, protegiendo tanto a la tripulación como las rutas marítimas estratégicas.
La Armada belga ha recibido oficialmente su primer buque de contramedidas de minas de la clase City, el Oostende (M940), en una ceremonia realizada en la base naval de Zeebrugge, Brujas. Este buque marca un hito en la modernización de las capacidades navales de Bélgica dentro del programa binacional rMCM, que incluye la construcción de 12 buques para Bélgica y los Países Bajos, buscando reemplazar progresivamente las antiguas unidades de las clases Tripartite y Alkmaar.
El diseño del Oostende se basa en la innovadora estrategia de «distanciamiento», permitiendo la localización y destrucción de minas marítimas sin que la nave tenga que ingresar en zonas de peligro. Para ello, utiliza una flota de drones multidominio —superficie, submarinos y aéreos— que ejecutan misiones de detección y neutralización de explosivos de forma remota, minimizando así los riesgos para la tripulación.
Este buque mide 82,6 metros de eslora y cuenta con una tripulación de 63 personas. Está propulsado por tres generadores diésel y dos motores eléctricos, alcanzando velocidades máximas de 15 nudos y una autonomía para recorrer más de 3.500 millas náuticas. Sus sistemas embarcados incluyen dragas, grúas, sistemas de identificación y destrucción de minas, y módulos acústicos que refuerzan su capacidad antisubmarina.
El programa rMCM está gestionado por Belgium Naval & Robotics, una asociación entre el Grupo Naval francés y Exail. Naval Group supervisa la construcción naval y Exail suministra los sofisticados sistemas de drones autónomos fabricados en Bélgica. La entrega del Oostende había sufrido retrasos debido a desafíos técnicos y daños menores en pruebas, pero ahora la tripulación iniciará un entrenamiento progresivo, comenzando con navegación y avanzando a operaciones con drones tras la integración de los sistemas de misión.
El segundo buque de la serie, Vlissingen (M840), se entregará a la Armada neerlandesa en febrero de 2026 tras completar pruebas adicionales. Los primeros sistemas no tripulados para ambos países llegarán a fines de noviembre de 2025, reforzando así una estrategia conjunta para modernizar las acciones de contramedidas de minas en la región.
El Oostende representa un ejemplo destacado de cooperación internacional, construido bajo el marco del Acuerdo de Cooperación Belga-Holandés y en el contexto del programa europeo de Cooperación Estructurada Permanente. Esta plataforma tecnológica avanzada permitirá a Bélgica y a sus socios mantener rutas marítimas seguras y responder eficientemente a las amenazas de minas en entornos costeros y oceánicos.
Fuente e imagen: Ministerio de Defensa de Bélgica.
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