BAE Systems Australia y BlueScope Steel han formalizado un histórico contrato marco de cinco años para el suministro de acero fabricado localmente que garantizará la construcción robusta y especializada de las fragatas clase Hunter del programa naval australiano. Este suministro fortalece la autonomía industrial y la cadena logística nacional, vital para la defensa marítima.
BAE Systems Australia y BlueScope Steel, con sede en Melbourne, acordaron un marco estratégico de cinco años para el suministro de acero local especializado destinado al programa de fragatas clase Hunter de la Real Armada Australiana. La acería Port Kembla de BlueScope, ubicada en Nueva Gales del Sur, será responsable de la producción del acero de alta resistencia necesario para la fabricación de tres fragatas antisubmarinas en el astillero naval de Osborne, Australia del Sur. Cada unidad incorporará aproximadamente 5.000 toneladas de acero australiano, con 77% del material proveniente de BlueScope Distribution.
Las láminas de acero están diseñadas a medida para soportar las condiciones más exigentes en operaciones navales, cumpliendo rigurosamente con los estándares de durabilidad y resistencia requeridos por la fuerza naval de Australia. Además del suministro de materiales, BlueScope Distribution gestionará la logística, el almacenamiento y la entrega, alineándose con el modelo operacional de construcción «acero entra, envío sale» de BAE en Osborne. El apoyo técnico, certificado y la gestión integral de proyectos completan la contribución de BlueScope a lo largo de todas las fases operativas.
El consorcio subraya que este acuerdo fortalece la capacidad soberana del país al garantizar una cadena de suministro nacional estable ante potenciales interrupciones internacionales. Andy Coxal, director de entregas de BAE Systems Maritime Australia, destacó que las fragatas Hunter representan un esfuerzo nacional clave, con empresas australianas como BlueScope jugando un rol fundamental para mantener una industria de defensa autosuficiente capaz de proteger las rutas marítimas críticas.
Mark Smith, director general de BlueScope Distribution, enfatizó el compromiso conjunto para respaldar una cadena de suministro integrada y totalmente nacional para la defensa, reconociendo la larga colaboración entre ambas compañías. Según sus palabras, este acuerdo refleja la dedicación y confianza mutua en el desarrollo de capacidades industriales australianas.
El programa de fragatas Hunter, lanzado en 2018, tiene como objetivo principal modernizar la flota de la Real Armada Australiana al reemplazar las unidades Anzac que están en servicio desde la década de 1990. Inicialmente planificado para nueve buques, el programa fue ajustado en 2024 para una flota de seis, optimizando la combinación entre fragatas especializadas en guerra antisubmarina y unidades de propósito general.
Cada fragata Hunter medirá 151 metros de eslora, con capacidad para albergar a más de 200 tripulantes, además de un helicóptero grande, sistemas aéreos no tripulados y lanchas neumáticas de casco rígido medianas. Su capacidad ofensiva incluye torpedos antisubmarinos, misiles antibuque, misiles de crucero para ataque terrestre, misiles tierra-aire, cañones automáticos y sistemas de defensa de punto automatizados.
La propulsión es proporcionada por una turbina de gas Rolls-Royce MT30, complementada con dos motores eléctricos y cuatro generadores diésel de alta velocidad, permitiendo velocidades superiores a 27 nudos y una autonomía de 7.000 millas náuticas. La construcción del buque líder comenzó en enero de 2025, con una entrada en servicio prevista para 2032, consolidando un sistema de defensa naval avanzado y soberano totalmente apoyado en la industria local.
Este acuerdo entre BAE Systems y BlueScope representa un hito en la fabricación local de acero para la defensa, reforzando la capacidad autónoma de Australia en un momento estratégico para su seguridad marítima y la modernización de su flota naval.
Fuente e imagen: BAE Systems.





